La nota de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), entregada a Prensa Latina, afirma que esas labores acontecen en las municipalidades de Huacaya y Machareti, colindantes con las estribaciones de los Andes y la región del Chaco.
Esos trabajos acontecen en el contexto de los objetivos estratégicos de YPFB y el plan de reactivación de exploración, descubrimiento y producción de los carburantes, el cual incluye el estudio de áreas hidrocarburíferas para evaluaciones técnico-económicas que pudieran presentar oportunidades.
“Los montañistas en campo realizan el traslado de equipo de perforación transportable y herramientas”, informó Pablo Machaca, coordinador del colectivo de Montaña y Rescate.
Explicó que la misión de este grupo especializado es minimizar los riesgos, al transportar equipos en pendientes con un ángulo mayor de 90 grados, en lo cual tienen mucha experiencia.
La mayoría de este personal procede del Grupo de Salvamento Bolivia, fundado el 15 de febrero de 1988 como una institución civil y voluntaria con la misión de coadyuvar a los servicios de emergencia y de Socorro Andino Boliviano.
“Somos un equipo multidisciplinario, realizamos todo tipo de rescates en alta y media montaña en casos de emergencia. Prestamos servicios en áreas de topografía, perforación y registro”, precisó Machaca.
Adicionalmente, un grupo de enfermeros adiestrados en el enfrentamiento a circunstancias de emergencia cumplen misiones de primeros auxilios, aunque desde septiembre de 2022 no se reportan incidentes que los obliguen a entrar en acción, según el jefe de Enfermeros del Proyecto Vitiacua, Gabriel Fernández. YPFB informó a esta agencia de noticias que el proyecto forma parte de su Plan de Reactivación del Upstream (exploración, descubrimiento y producción de petróleo y gas).
Esta estrategia contempla la adquisición de 166,26 kilómetros de datos sísmicos 2D en Huacaya y Machareti, en la provincia de Luis Calvo, en Chuquisaca.
Hasta la fecha, se registra un avance del 100 por ciento de topografía y perforación, y de 32 puntos porcentuales de registro.
Los datos adquiridos del subsuelo serán procesados e interpretados con la última tecnología disponible, de manera de facilitar el delineado de estructuras presentes en el subsuelo, en las cuales se propondrán nuevas localizaciones de pozos exploratorios.
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