La Administración General de Aduanas indicó que durante el mes anterior el volumen total del comercio exterior fue poco más de 420 mil millones de dólares, un dato distante de los 1,94 billones de dólares generados en abril.
En detalle, las exportaciones experimentaron una baja de 0,8 puntos y las importaciones subieron 2,3.
El acumulado del comercio exterior desde enero arrojó una expansión de 4,7 por ciento.
Las cifras de mayo revirtieron la tendencia al alza mostrada en esos indicadores en el presente 2023 y entre los factores del decrecimiento figuran la continuidad de una débil demanda interna y la inflación fuerte en los principales destinos de las mercancías chinas, con contracciones en los envíos a Estados Unidos y la Unión Europea.
China para este año buscará, por sobre todas las cosas, mantener la estabilidad macroeconómica y social, pero al mismo tiempo continuará los esfuerzos para profundizar la política de reforma y apertura, acelerar el crecimiento sobre la base de la innovación y lograr el desarrollo de alto estándar.
Además, se plantea fortalecer más su mercado doméstico y las alianzas con países y regiones amigas como alternativa para reducir la dependencia de Estados Unidos y sortear los efectos de la crisis global que provoca la pandemia de Covid-19.
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