Considerado por la crítica especializada como uno de los escultores más influyentes de los siglos XX y XXI, su figura y obra son motivo de homenaje de esta muestra que conmemora el 99 aniversario de su nacimiento.
La exhibición incluye dieciséis piezas clave construidas entre los años 1983 y 2013 por el artista, cuyas creaciones de estilo abstracto se caracterizaron por el ensamblaje de objetos industriales metálicos de desecho.
En esta ocasión se trata de construcciones de gran tamaño que adoptan rasgos arquitectónicos como los pasillos, los escalones o las puertas, integrándolos a la esencia de la escultura.
Para la fabricación de estas piezas, Caro utilizó madera, acero, cemento, piedra y bronce, así como vidrio acrílico coloreado, material este último que propone un diálogo con las vidrieras que adornan el edificio sede de la exposición.
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