Durante una reunión para discutir sobre la aplicación de la declaración de compromisos de los Estados miembros de la ONU en la lucha contra el VIH/sida, el representante permanente de Nicaragua ante ese organismo, Jaime Hermida, resaltó la importancia de reforzar el multilateralismo y la solidaridad internacional.
Según el diplomático, lo anterior es necesario para intensificar los esfuerzos conjuntos, mejorar los sistemas de salud pública y garantizar los tratamientos de la referida enfermedad, además de asegurar la restitución de los derechos fundamentales de las personas afectadas.
Expresó que para su país es política de Estado brindar una atención integral, universal y de calidad mediante la entrega de tratamientos gratuitos, así como exámenes complementarios para los enfermos.
Añadió que el Ministerio de Salud y la Comisión Nicaragüense del SIDA desarrollan a nivel nacional sesiones ordinarias donde cada mes diferentes instituciones exponen, analizan los avances y retos de la respuesta local y nacional.
“Las instituciones nacionales priorizan la implementación de políticas de acciones dirigidas a grupos de jóvenes y adolescentes para lograr reducir los índices de contagio de esta enfermedad, promoviendo una salud sexual responsable”, manifestó.
Comentó que Nicaragua en su pleno compromiso con la referida declaración y como parte del fortalecimiento del marco legal nacional, aprobó en 2012 la ley 820, con la cual promueve la protección y defensa de los derechos humanos ante el VIH/sida.
En ese sentido, también mencionó el plan estratégico nacional de respuesta ante las Enfermedades de Transmisión Sexual 2020-2024, el cual se ejecuta a través de un proceso de capacitación a las distintas instancias.
Al referirse a la puesta en práctica de las clínicas de atención integral señaló que, en 2006, antes de la llegada al poder del Gobierno sandinista, el país sólo tenía siete instalaciones de ese tipo y en mayo de este año cerró con 117 distribuidas a nivel nacional.
De acuerdo con Hermida, dichas clínicas cuentan con equipos multidisciplinarios, médicos, enfermeras y personal de apoyo, quienes garantizan el acceso a la atención médica gratuita e integral para unas seis mil 800 personas con tratamiento antirretroviral.
Asimismo, hizo referencia a la atención emocional desde los centros psicosociales, así como a la creación de una nueva estrategia a través de la campaña “Vivir con VIH”, la cual promueve valores para acompañar con solidaridad a las personas con esa enfermedad.
“Hoy más que nunca es urgente poner fin a las ilegales medidas coercitivas unilaterales impuestas a más de una tercera parte de la población mundial”, subrayó.
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