Durante la ceremonia oficial de recibimiento en esta capital, preparada por el Gobierno sandinista, el jefe de Estado iraní manifestó que desde el inicio de la victoria de la Revolución Islámica existe una excelente relación fraterna con la Revolución nicaragüense.
“Queremos aumentar y profundizar nuestras relaciones en todas las áreas, políticas, económicas, culturales y en todos los ámbitos, sobre todo, en materia de ciencia y tecnología”, expresó Raisi junto a su homólogo Daniel Ortega y la vicemandataria Rosario Murillo.
El gobernante de la nación persa señaló que el enemigo (Estados Unidos) quiere decepcionar a los pueblos revolucionarios, y se refirió al nuevo orden mundial, el cual -acotó- se forma a favor de la resistencia de los pueblos y en contra de los intereses imperialistas.
Aludió al sistema democrático iraní y afirmó que en los 44 años de la Revolución Islámica siempre es el voto popular el que decide las autoridades de los órganos de Gobierno.
Al respecto, comentó que desde occidente y Estados Unidos, en particular, pretenden defender la democracia, pero actúan contrarios a ese principio y no respetan a los gobiernos elegidos con el voto popular de sus pueblos.
“Ellos mienten sobre sus pretensiones de la democracia y los derechos humanos”, subrayó.
Por otra parte, comentó que fue Washington y los imperialistas del mundo los que crearon al grupo terrorista Estado Islámico (Dáesh en árabe).
En ese sentido, recordó que el héroe iraní de la lucha contra el terrorismo era el general Qasem Soleimani, quien fue asesinado por el Gobierno estadounidense.
Por último, agradeció al Gobierno sandinista por el caluroso recibimiento a él y la comitiva que lo acompaña en su primera visita de dos días a este país centroamericano.
Raisi llegó esta tarde a Nicaragua procedente de Venezuela, al frente de una amplia delegación, integrada por la primera dama Jamileh Alamolhoda, y los ministros de Salud, Cultura, Petróleo y Diplomacia Económica.
npg/ybv