Un comunicado de la Mesa Política del FA calificó de «pocas e improvisadas las medidas adoptadas por el poder ejecutivo ante la coyuntura hídrica, que tiene al mínimo las reservas de agua dulce de la principal fuente de abasto de la capital y la zona metropolitana.
En el pronunciamiento, el Frente manifiesta «preocupación» porque el Ejecutivo aún no definió la emergencia sanitaria y convocara al Sistema Nacional de Emergencia para encarar la crisis.
El texto recuerda que desde mayo los gobiernos departamentales de Montevideo y Canelones advirtieron de la necesidad de declarar la alerta, lo cual fue minimizado por el Ejecutivo.
«Hoy más de la mitad de la población del país, que vive en el área metropolitana, recibe en su casa agua que no es potable y eso se debe a que el Gobierno de coalición no ha respondido a esta crisis con la responsabilidad que se debe», señala el comunicado.
El FA considera notoria la falta de acciones para garantizar el acceso al agua potable.
Alerta además que la compra de agua embotellada genera nuevos costos «en los ya deteriorados bolsillos de las familias uruguayas».
Para el próximo lunes el presidente Luis Lacalle Pou convocó a ministros del gabinete para analizar la situación y los efectos de la sequía, que persiste por tercer año.
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