Llamado Consejo OTAN-Ucrania, ese mecanismo tuvo su primera cita en esta jornada y deviene escenario para que Kiev y los aliados puedan realizar consultas y tomar decisiones en pie de igualdad, según trascendidos.
Acabo de presidir la reunión inaugural. A partir de ahora ambas partes nos reuniremos en el Consejo para discutir y decidir de igual a igual. Este es un paso significativo para acercar a Ucrania a la alianza, declaró su secretario general Jens Stoltenberg, en una rueda de prensa tras la segunda y última jornada de la cumbre.
El acercamiento aparece como la solución momentánea ante la imposibilidad de integrar a Kiev, hecho que en estos momentos es inconveniente debido al conflicto bélico con Rusia.
En la declaración adoptada en la cita los representantes de las 31 naciones señalaron que la OTAN estará en posición de extender una invitación a Ucrania para unirse cuando los aliados lo acuerden y las condiciones se cumplan.
La víspera Zelenski consideró absurdo que no se fijara una fecha de invitación para la adhesión de su país, pero hoy cambió el tono y agradeció el apoyo obtenido de sus aliados occidentales.
Los presentes en Vilna también acordaron reducir de dos a un solo paso su proceso de ingreso, lo que significaría que Kiev estaría exento de participar en un programa de varios años para demostrar que acometió las reformas militares, económicas y políticas necesarias.
En el marco de la cumbre el presidente francés, Emmanuel Macron, aseguró que enviará misiles de alcance medio tipo “Scalp” a Ucrania mientras Alemania anunció un nuevo paquete por valor de cerca de 700 millones de euros.
Durante la cita de la alianza atlántica también se discutió sobre el ingreso de Suecia, noticia que en su momento causó sorpresa en la opinión pública debido a la histórica política de neutralidad de Estocolmo
También sorprendió el giro de Türkiye, país que hasta ahora se opuso a esa opción alegando que el país nórdico no hacia esfuerzos suficientes para combatir el terrorismo.
Pero el lunes, tras una reunión entre el primer ministro sueco, Ulf Kristersson, y el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, anunció el desbloqueo de Ankara a la adhesión y lo calificó como paso histórico.
Como parte de este proceso, Suecia enmendó su constitución, cambió sus leyes, amplió su cooperación antiterrorista contra el grupo armado kurdo PKK e, incluso, reanudó las exportaciones de armas a Türkiye.
No obstante, Hungría tiene aún pendiente su ratificación formal, pero tras lo sucedido, analistas lo consideran como una mera “cuestión técnica”.
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