Por medio de un comunicado, la Cancillería instó al Consejo de Seguridad que asuma sus responsabilidades y condene la agresión, además de tomar medidas inmediatas para obligar a Israel a desistir de estas políticas criminales que violan flagrantemente el derecho internacional y humanitario y la Carta de las Naciones Unidas.
Asimismo, hizo un llamado a los gobiernos occidentales que protegen y apoyan a Tel Aviv para que no obstruyan la labor del Consejo de Seguridad destinada a poner fin a los crímenes de las autoridades de ocupación israelíes y que estas últimas rindan cuentas.
En horas de la madrugada de este miércoles, cazas israelíes lanzaron varias andanadas de misiles contra algunos sitios en las cercanías de la ciudad de Damasco, causando lesiones a dos uniformados y daños materiales.
Este es el decimosexto ataque que realiza Israel en el presente año, el anterior ocurrió el pasado 1 de julio pasado contra posiciones en la provincia central de Homs, a unos 200 kilómetros al norte de esta capital.
Nueve de esas acciones hostiles se llevaron a cabo contra la capital del país y sus alrededores; tres en el aeropuerto de Alepo, en el norte de Siria; uno contra el municipio de Messiaf, en la provincia de Hama, y cinco hicieron blanco en la gobernación de Homs.
Israel ataca con frecuencia el territorio de Siria bajo el pretexto de atentar contra blancos iraníes, mientras Damasco asegura que estos enfrentamientos provocan víctimas en la población civil, pretenden prolongar la guerra, mantener inestable al país y debilitar su ejército nacional.
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