Según medios periodísticos, Andreia Mantovani, esposa del empresario Roberto Mantovani, se aproximó el 14 de julio a De Moraes en la terminal aérea Fiumicino, en Roma, cuando este venía de impartir una conferencia en el Foro de Derecho Internacional de la Universidad de Siena.
La mujer, partidaria confesa del expresidente Jair Bolsonaro, hostilizó al ministro debido a su actuación en cuestiones contrarias relacionados con el político ultraderechista.
Teniendo en cuenta lo publicado, afrontó al juez bajo gritos de «bandido, comunista y vendido».
En ese momento comenzó un altercado que involucró al marido, a la cónyuge y el yerno del matrimonio, Alex Zanatta Bignotto.
La pareja negó después ante la PF haber agredido al magistrado y, de acuerdo con la defensa, solo admite haber dado un empujón al hijo del juez para defender a la mujer, víctima de ofensas por parte del muchacho.
En la versión del empresario y su compañera ambos fueron confundidos con otros brasileños que insultaron al letrado.
De esa confusión interpretativa nació un desacuerdo verbal entre ella y dos personas que acompañaban al ministro, informa en una nota la familia.
«En ningún momento ocurrieron ofensas, mucho menos amenazas al ministro Alexandre, que casualmente pasó por ellos en ese infeliz episodio. Aun así, se disculpan por el malentendido que hubo y manifiestan respeto que tienen por las autoridades públicas, extensivo a sus familiares», señala la pareja.
Además de los insultos contra De Moraes y sus familiares, una de las personas llegó a agredir físicamente al hijo del ministro.
En otras ocasiones, miembros del Supremo Tribunal Federal sufrieron ataques por adeptos extremistas de Bolsonaro.
La PF inició una investigación sobre el caso y pidió ayuda a la fuerza del orden público de Italia, incluyendo acceso a las imágenes de las cámaras del aeropuerto.
El código penal establece que los crímenes cometidos por brasileños en el exterior también pueden quedar sujetos a la ley nacional. Los involucrados pueden responder por agresión, amenaza, injuria y difamación.
Una representación de la PF en Roma recibió las imágenes el jueves y espera la aprobación de las autoridades italianas para transferir el archivo a Brasil por el canal de la cooperación jurídica.
Informes revelan que las imágenes muestran que el hijo de De Moraes recibió una bofetada, que terminó tirando sus gafas al suelo.
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