Abraham Zebian, alcalde de la Municipalidad Regional de West Hants, estuvo en el sitio y declaró que los equipos de búsqueda bombean más de 94 mil litros de agua por minuto desde el campo donde se presume están las víctimas desde el pasado sábado.
Citado por CTV News, el funcionario afirmó que las labores acometidas buscan que los equipos de rescate en tierra puedan tener un acceso más fácil al área.
El sábado por la noche, un equipo de buceo de la Real Policía Montada de Canadá recuperó una camioneta desocupada en más de dos metros de agua y refirió que podría tratarse de un vehículo en el que viajaban dos niños.
Los funcionarios de la ley explicaron anteriormente que los menores estaban con otras tres personas que lograron escapar.
Asimismo, equipo especializado intenta localizar, en la misma zona, un segundo auto en el que viajaban un joven y un hombre que se encuentran en paradero desconocido.
Las fuertes lluvias, que comenzaron el viernes, arrojaron entre 200 y 250 milímetros a lo largo de la costa sur de Nueva Escocia, en el área de Halifax y en las partes central y occidental de la provincia.
Si bien las inundaciones retrocedieron ayer en gran medida, dejaron atrás una red de carreteras y puentes dañados y arrasados en la provincia, mientras autoridades confirmaron daños en partes de la línea férrea CN que llega al puerto de Halifax.
Un estado de emergencia en toda la provincia fue declarado el sábado y permanecerá vigente hasta el 5 de agosto, añadió el reporte.
En medio de la devastación, el primer ministro de Nueva Escocia, Tim Houston, se comprometió a reconstruir la provincia que quedó bajo el agua después de experimentar recientemente un intenso comienzo de la temporada de incendios forestales.
Desde la noche del viernes, la provincia ha sido azotada por lluvias intensas e incesantes que alcanzaron los 200 milímetros en menos de 12 horas y dejó a unos 40 mil residentes sin electricidad.
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