De acuerdo con el Centro Nacional de Meteorología, las intensas precipitaciones están asociadas al tifón Doksuri, el cual tocó tierra en la provincia oriental de Fujian el viernes pasado y continuó su desplazamiento hacia el noroeste.
En la capital las autoridades decretaron la alerta máxima, recomendaron la disminución de las salidas y sugirieron el trabajo desde casa para las empresas.
Según los reportes, esta situación debe continuar hasta el martes próximo en la capital, por lo que los expertos advierten sobre posibles inundaciones de ríos pequeños y desastres geológicos.
Las regiones próximas de Hebei y Shandong también se encuentran bajo la influencia de las bandas de lluvias del quinto tifón de este año, que ya se ha debilitado paulatinamente.
El Ministerio de Recursos Hídricos y la Administración Meteorológica de China emitieron también alertas rojas y naranjas por torrentes de montaña en partes de Beijing, Hebei y Shanxi.
Doksuri afectó a más de 725 mil personas en la provincia oriental de Fujian y previamente hizo numerosos estragos en Taiwán y Filipinas, en este último se reportaron más de 50 fallecidos por la acción de las lluvias y los vientos.
China tiene un sistema de alerta meteorológica de cuatro niveles, en el cual el rojo representa la advertencia más severa, seguido de naranja, amarillo y azul.
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