El sospechoso disparó primero a dos mujeres de 49 y 72 años y a un hombre de 52 en un edificio de viviendas de Langweid am Lech el pasado viernes, según ha informado la Policía, citada por la televisión local.
Una mujer de 32 años y un hombre de 44 también resultaron heridos en una vivienda cercana y se encuentran hospitalizados sin que su vida corra peligro.
Finalmente, este domingo se ha emitido una orden de detención que ha podido ser ejecutada por la Policía, que investiga ya lo ocurrido, aunque los primeros indicios apuntan a una disputa vecinal.
La Policía destacó que el sospechoso es un tirador deportivoque poseía varias armas con licencia, las cuales fueron previamente incautadas en su domicilio.
Por otro lado, el grupo alemán Ningún Arma Asesina reiteró su petición de prohibir todas las armas deportivas en el país.
El riesgo de estas armas deportivas no se puede controlar, apuntó su portavoz, Roman Grafe, al alertar que la normativa es demasiado laxa.
Estas armas han sido utilizadas para matar a personas en Érfurt (2002), Winnenden (2009), Hanau (2020) y Hamburgo (2023) y aún son fáciles de adquirir por cualquier tirador deportivo aficionado, señaló.
Sin embargo, el ministro del Interior de Baviera, Joachim Herrmann, descartó esta demanda y al subrayar que actualmente no se estudia imponer más controles, sobe las alarmas deportivas porque Alemania ya tiene una de las legislaciones sobre armas más estrictas de Europa.
La gran mayoría de los crímenes cometidos con armas de fuego están relacionadas no con armas legales, sino con armas ilegales, sostuvo Hermann.
mem/amp