De acuerdo con la acción, en la campaña electoral de 2018, Bolsonaro hizo una mímica de ejecución, al utilizar un trípode de cámara de video como simulacro de arma de fuego.
Mientras hacía el movimiento manifestó: «Vamos fuzilar a petralhada», que algunos entendidos traducen como eliminar a individuos, cuya mentalidad resulta atrasada, inmoral, antiética, fuera de lógica.
En su decisión, el juez del STF atendió a la Procuraduría General de la República que defendió en el juzgado el envío del expediente a las instancias inferiores.
Zanin asumió la relatoría del caso por sustituir al ministro Ricardo Lewandowski, quien pasó a retiro en abril.
Para el magistrado, con el fin del mandato de Bolsonaro, se produjo la pérdida del foro privilegiado.
«Con el advenimiento del término del mandato de presidente de la República, en el cual se encontraba investido el representado Jair Messias Bolsonaro, y no siendo él reelegido para pleito subsecuente, hubo la superveniente causa de cese de la competencia jurisdiccional del Supremo Tribunal Federal», precisó.
El 3 de agosto, Zanin, designado para el puesto por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, juró como miembro de la corte superior y prometió «bien y fielmente cumplir con los deberes del cargo de ministro del Supremo Tribunal Federal, de conformidad con la Constitución y las leyes de la República».
De 47 años, el letrado podrá permanecer en el cargo hasta cumplir 75, edad límite para jubilación obligatoria.
Heredó cerca de 500 procesos que estaban en el gabinete de Lewandowski, entre ellos, acciones contra la conducta de Bolsonaro durante la pandemia de Covid-19.
Ganó notoriedad nacional e internacional como jurista responsable de la defensa de Lula durante la desarticulada operación judicial Lava Jato.
Su actuación resultó en la anulación de las condenas contra el exsindicalista por el STF.
Fue a partir de un proceso encabezado por el abogado que la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas reconoció que la prisión de Lula, en 2018, violó el debido proceso y que, por lo tanto, la prohibición de participar en las elecciones de ese año quebrantó los derechos políticos del exdirigente obrero.
Graduado en derecho por la Pontificia Universidad Católica de Sao Paulo en 1999, Zanin es especialista en litigios estratégicos y decisivos, empresariales o criminales, nacionales y transnacionales.
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