Fuentes oficiales indicaron que más de 100 mil mujeres reunidas en Brasilia cumplieron un recorrido este miércoles hasta el Congreso Nacional, por la reconstrucción del país.
Desde el fin de semana hasta el martes, cientos de autobuses llegaron al Pabellón del Parque de la Ciudad, trayendo a las participantes de la marcha, coordinada por la Confederación Nacional de Trabajadores Rurales Agricultores y Agricultoras Familiares (Contag), federaciones y sindicatos afiliados, y 16 organizaciones asociadas.
«Cuando ustedes caminaban bajo el sol de esa Explanada (de los Ministerios), en 2019, en la última marcha, yo estaba preso en Curitiba, víctima de una persecución de los que quieren impedir que Brasil cambie», aseguró Lula.
Recordó que estaba distante, «pero oí el grito de ustedes por justicia, escuché cuando repitieron tantas veces el clamor Lula Libre».
Aludió a una carta enviada a aquella marcha, en el que reafirmaba el compromiso de construir un país mejor, «más cariñoso con las mujeres y más generoso con los más pobres».
Un Brasil, apuntó, «en el que todas y todos puedan desayunar, almorzar y cenar todos los días» y «en el que los niños y jóvenes tengan la oportunidad de estudiar».
Además, «un país hecho por las manos de mujeres como ustedes, margaritas, que se organizan y luchan por el sueño de un mañana mejor», refirió.
Elogió a las mujeres que salieron de tantos rincones del gigante sudamericano y del mundo, que viajaron kilómetros y largas horas para sumar su voz a ese grito de esperanza.
«Ustedes son parte fundamental de ese Brasil que vuelve a la democracia, a la justicia social y a la búsqueda del bien vivir», recalcó.
Para el exdirigente obrero, resulta necesario «crear una cultura de respeto en el campo y en las ciudades. No toleramos más discriminación, misoginia y violencia de género».
En la movilización política, considerada la mayor de América Latina por la Contag, mujeres de todas las regiones de Brasil quieren garantizar derechos, poner fin a las desigualdades de género, clase y étnico-raciales; enfrentar la violencia, que muchas veces amenaza su vida, y la opresión, simplemente, por ser mujeres.
Sus pautas fueron debatidas durante dos años, en reuniones regionales y nacionales que resultaron en un documento dividido en 13 ejes políticos. La agenda de la Marcha de las Margaritas 2023 fue entregada al Gobierno federal en junio.
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