Delgatti fue sancionado por la operación Spoofing, cumplida por la Policía Federal (PF), que investiga la fuga de conversaciones de autoridades vinculadas con la desarticulada Lava Jato.
Por el momento, el invasor cibernético permanece en la cárcel, a causa de otra indagación sobre sospecha que fue pagado por la congresista Carla Zambelli para invadir los sistemas electrónicos del Poder Judicial.
El juez de la sentencia en Spoofing, Ricardo Augusto Soares, sustituto de la décima Corte Federal del Distrito Federal, afirmó que quedó comprobado que muchas autoridades tuvieron burladas su seguridad informática.
«La amplitud de las víctimas es inmensa y podría rendir innumerables ocasiones de extorsiones», escribió el magistrado.
Precisó que los ataques cibernéticos del programador «fueron dirigidos a diversas autoridades públicas, en especial agentes responsables de la persecución penal, además de varios otros individuos que poseen destaque social, bastando verificar las cuentas que tuvieron contenido exportado».
Resulta reincidente, «conforme comprueba su historial criminal y posee otros registros penales», remarcó.
Soares señaló que Delgatti llegó a proponer la venta del material hackeado para la prensa por 200 mil reales (cerca de 40 mil dólares).
El hacker afirmó la pasada semana que estaría dispuesto a un careo con Bolsonaro, quien le ofreció indulto de ser detenido si invadiría las urnas durante las pasadas elecciones en el país.
Confirmó en la Comisión Parlamentaria de Investigación sobre los actos golpistas del 8 de enero en esta capital que se vio en 2022 con el excapitán del Ejército en el Palacio de la Alvorada, residencia oficial de los mandatarios.
Durante su testimonio, el ciberpirata reveló además que Bolsonaro le orientó ir al Ministerio de Defensa y explicar a técnicos cómo defraudar las urnas.
También le pidió que asumiera la autoría de un clip contra el ministro Alexandre de Moraes, del Supremo Tribunal Federal (STF), y le aconsejó usar un «código fuente falso» para decir que el del Tribunal Superior Electoral era susceptible de fraude.
En 2019, Delgatti se hizo conocido en Brasil por filtrar a la prensa mensajes de la aplicación WhatsApp del exjuez Sérgio Moro con los fiscales del caso Lava Jato, en los cuales quedó al desnudo la persecución jurídica contra el presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
También la pasada semana, Delgatti reveló ante la PF que recibió dinero (unos ochos mil dólares) de Zambelli, partidaria de Bolsonaro, para que invadiera cualquier sistema judicial brasileño.
oda/ocs