Garay enfrentó un proceso durante varios días y ahora el tribunal decidirá si es deportado por su presunta participación en ejecuciones extrajudiciales tergiversando los hechos en su solicitud de inmigración.
El juez Brian Palmore aseveró que su decisión será dada “en dos o tres semanas”, después que los abogados entreguen hoy sus alegatos finales por escrito.
El magistrado, la abogada del gobierno y el defensor de Garay escucharon el testimonio de la perita Terry Karl, quien explicó la conformación de la Fuerza Armada en El Salvador, los grados militares y las masacres ocurridas, especialmente tres en las cuales está presuntamente vinculado el exmilitar.
Garay fue miembro del Batallón de Infantería de Reacción Inmediata Atlacatl, comando perpetrador de la masacre de El Mozote, en Morazán, en 1981, en la cual fueron ultimados cerca de mil salvadoreños, entre ellos niños, ancianos y mujeres.
Organizaciones defensoras de derechos humanos en El Salvador esperan que Garay sea declarado responsable de violaciones a derechos humanos y sea deportado para que enfrente la justicia, en un dilatado proceso que como en otros en el país reina la impunidad.
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