De esta manera ordenó la activación de las llamadas Cuadrillas de Paz en todo el territorio nacional para garantizar que “el fascismo no imponga la agenda de la violencia en el país”.
El mandatario hizo referencia a las declaraciones del exalcalde de Caracas Antonio Ledezma, quien desde el extranjero hizo un llamado a la intervención militar y un nuevo golpe de Estado contra el gobierno bolivariano.
Según comentó, las palabras de Ledezma, prófugo de la justicia y con orden de captura y extradición ordenada por la Fiscalía General, revelan sus intentos de convocar a la desobediencia civil y se corresponde con el modus operandi adoptado por la derecha anteriormente.
“He dado la orden de activar las cuadrillas de paz. Cuadrillas de Paz, alerta, a la calle, activadas, a garantizar la paz en todo el país”, expresó el presidente en su programa “Con Maduro +”.
Se refirió entonces a la movilización de más de cuatro millones de milicianos y milicianas en el plan antigolpe para garantizar la tranquilidad ciudadana.
Asimismo, llamó llamo al pueblo de Venezuela a defender la paz, la soberanía y la unidad interna.
El jefe de Estado avaló el accionar de la Fiscalía General de la República que inmediatamente actuó a través de su máxima autoridad, Tarek William Saab, al ordenar la captura internacional de Ledezma.
“Actuó rápido, a tiempo, y hay que acompañar a las instituciones para que Venezuela haga justicia. No se puede permitir al fascismo y al golpismo que llenen de violencia estéril. No se le puede permitir”, afirmó.
El gobernante recordó cómo la instigación a la violencia contra la revolución bolivariana comenzó en 2002 con el fallido golpe de Estado al fallecido líder Hugo Chávez (1954-2013), al que le siguieron otros intentos desestabilizadores en 2004, en 2014, y en 2017.
Maduro pidió a los venezolanos hacer caso omiso a los llamados al odio y «al golpismo extranjero que ciertos grupúsculos intentan retomar».
“Vamos con las Cuadrillas de Paz, alertas y activadas para garantizar la paz del país”, sentenció.
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