Citadas por la agencia oficial de noticias Wafa, fuentes locales explicaron que el ingreso de los militares provocó fuertes enfrentamientos con jóvenes residentes.
Los heridos fueron trasladados al hospital público para recibir tratamiento médico, señalaron.
De forma paralela, este domingo docenas de colonos irrumpieron en la Explanada de las Mezquitas, en la zona ocupada de Jerusalén Este.
Bajo la protección de la policía israelí, los colonos ingresaron en grupos al complejo religioso.
El presidente del Consejo Nacional Palestino (Parlamento), Rawhi Fattouh, condenó ayer el más reciente ataque de las fuerzas de seguridad contra los fieles en la mezquita de Al-Aqsa, ubicada ese complejo.
La agresión el viernes contra las personas presentes en el lugar representa un acto de fascismo y terrorismo, así como una violación de la libertad de culto, señaló el funcionario en un comunicado.
La Explanada de las Mezquitas es venerada tanto por musulmanes, que la llaman Noble Santuario, como por judíos, que la conocen como el Monte del Templo.
Israel ocupó la zona oriental de la metrópoli en la guerra de 1967, y desde entonces mantiene bajo su control el territorio pese a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
De hecho, en 1980 las autoridades israelíes declararon a toda la urbe como la capital eterna e indivisible del país, una postura rechazada por la comunidad internacional.
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