De acuerdo con el observatorio nacional, el noveno tifón de este año tiene un rumbo en dirección suroeste a una velocidad de unos 17 kilómetros por hora, debilitándose gradualmente antes de volver al mar.
Según las autoridades locales, la víspera 780 mil personas de Guangdong fueron evacuadas de áreas de riesgo, al igual que otras 100 mil en la vecina provincia de Fujian.
Asimismo, permanecen suspendidos la mayoría de los servicios de trenes y ferry, mientras que más de 80 mil botes de pesca regresaron a puerto.
El observatorio de Hong Kong emitió la máxima alerta de huracán en el sistema meteorológico de la ciudad, algo que no se hacía desde el supertifón Mangkhut en 2018.
De hecho, la mayor parte de esta región administrativa especial y otros sectores de la costa sur del país suspendieron las actividades comerciales, el transporte y las clases escolares.
Asimismo, el observatorio nacional instó a prepararse ante posibles emergencias y contra desastres geológicos.
El gigante asiático sufrió recientemente una serie de desastres vinculados a fenómenos meteorológicos extremos como las lluvias intensas asociadas a los tifones Talim, Doksuri y Khanun.
De hecho, el mes pasado las precipitaciones en el gigante asiático provocaron pérdidas económicas millonarias con miles de hectáreas de cultivos destruidas, infraestructuras derrumbadas y alrededor de 100 muertos.
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