La delegación nacional, que embarcó luego del acto central con desfile militar por el Día de la Independencia en la capitalina Explanada de los Ministerios, tiene previsto arribar mañana en la noche a Nueva Delhi tras hacer escalas en Recife (Brasil) y Túnez.
En el foro de líderes, con agenda el 9 y 10 de septiembre, Brasil recibirá la presidencia rotativa del bloque, actualmente en manos de la India. Será asumida por el Gobierno a partir del 1 de diciembre.
Se esperan pronunciamientos del exsindicalista en las dos primeras sesiones y en el cierre del encuentro.
Según el secretario de Asuntos Económicos del Ministerio de Relaciones Exteriores, Maurício Lyrio, el gobernante brasileño defenderá en la capital india medidas para disminuir el hambre en el mundo.
Convocará a reducir las desigualdades económicas y sociales entre países, así como la pobreza.
El pasado viernes, Lula insistió en un evento en el estado Rio Grande do Sul que quiere «discutir la desigualdad. La desigualdad de género, la desigualdad racial, la desigualdad en el tratamiento de la salud, en el salario, la desigualdad de una persona que come 20 veces al día y la otra que está 20 días sin comer».
Lyrio informó además que existen varias solicitudes de reuniones bilaterales con el jefe de Estado al margen de la cita del G20.
El fundador del Partido de los Trabajadores «ya esbozó cuál es la política exterior brasileña y cómo será la presidencia de Brasil en el G20», apuntó.
Tras el G20, Lula participará en la cumbre del Grupo de los 77 más China en La Habana, Cuba, el 15 y 16 de septiembre.
Después continuará viaje hacia Nueva York, Estados Unidos, donde asistirá a la Asamblea General de las Naciones Unidas, que se realizará del 19 al 23 de septiembre.
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