Por Latinoamérica y el Caribe, la región menos representada en el G20, asisten a la cita los presidentes de Argentina, Alberto Fernández, y Luis Inácio Lula da Silva, de Brasil, quien recibirá la presidencia rotativa de la agrupación de manos de la India.
La ministra de Economía Raquel Buenrostro Sánchez participa por México en el evento que culminará mañana domingo y se desarrollará en tres sesiones: Una Tierra, Una Familia y Un Futuro.
La cumbre de las economías más potentes del planeta y la Unión Europea se efectúa en momentos complejos con un mundo geopolíticamente dividido, una crisis financiera, sanitaria y ecológica y en medio de conflictos que amenazan con agravar aún más el panorama internacional.
Concluyente de un año intenso con más de 220 reuniones en 60 ciudades del país surasiático, el evento deberá finalizar con la Declaración de Delhi, la cual se prevé que aúne el consenso del bloque en torno a los siguientes pasos en función de las prioridades del G20 y del orbe.
La víspera, en una conferencia en el Centro Internacional de Prensa en el Bharat Mandapam, organizadores del evento aseguraron que el documento incluirá las voces del Sur Global y de los países en desarrollo.
Precisaron que el texto estaba casi listo por los negociadores para la posterior revisión y aprobación por parte de los presidentes y altos representantes de los países del G20 que participan en el encuentro.
Sobre la propuesta de India, como presidenta del G20, en cuanto a la inclusión de la Unión Africana en categoría de miembro pleno de la agrupación, el secretario de Asuntos Exteriores, Vinay Kwatra, manifestó su esperanza de una decisión adecuada al respecto.
Por su parte, el representante del Gobierno a cargo de la preparación de la cumbre internacional, el sherpa Amitabh Kant recordó que su país enfocó su presidencia en las problemáticas que afectan el Sur Global.
Señaló que, al frente del G20, India insistió, por indicación del primer ministro, Narendra Modi, en los principios del crecimiento audaz, sostenible e inclusivo en medio de la recesión mundial y en acelerar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
De igual modo, asumió el liderazgo en el desarrollo de las energías renovables en el contexto de la acción climática.
También centró su gestión en la importancia de la renovación de las instituciones multilaterales en foros inclusivos y más democráticos, en el impulso del desarrollo tecnológico y hacer asequibles a todos la infraestructura pública digital.
Por último emprendió acciones para el avance de estrategias por el empoderamiento de la mujer y la promoción del liderazgo femenino, recordó Kant.
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