En su reunión periódica, el colectivo de diputados fijó su posición de cooperar con el resto de las fuerzas políticas para alcanzar un entendimiento, y rechazó toda forma de presión, dependencia o extorsión.
Los legisladores respondieron de manera positiva a las oportunidades brindadas por el enviado francés, Jean-Yves Le Drian, y el titular del Parlamento, Nabih Berri, para alcanzar la celebración de las elecciones presidenciales.
Encabezado por el representante Muhammad Raad, el bloque manifestó su voluntad de trabajar para establecer en Líbano un Estado integral con libre decisión, gobernado por la ley y administrado por instituciones.
Al mismo tiempo, reafirmó el apoyo a un candidato que defienda la soberanía, la estabilidad, la paz civil y los derechos e intereses de los libaneses.
En este contexto, Lealtad a la Resistencia exigió reconsiderar la política económica adoptada anteriormente, como resultado de la cual el país no obtuvo más que pobreza, impotencia y parálisis en los distintos sectores de producción.
Los parlamentarios insistieron en la urgencia de realizar esfuerzos para garantizar la estabilidad monetaria sobre la base de estimular el movimiento del mercado, la producción, elevar el precio de la moneda nacional, adoptar prioridad en el gasto con el fin de mejorar las condiciones del sector público y satisfacer las necesidades del pueblo.
Reclamó activar el trabajo de los organismos judiciales y de seguridad, así como mejorar la integridad y eficacia de los entes de supervisión administrativa, reforzar el control y combatir la corrupción.
En esta línea, refrendó el derecho de Líbano a invertir en sus recursos en el mar y en la tierra, lejos de las ambiciones israelíes que afectan la seguridad y la estabilidad del país.
También pidió abordar de manera conjunta el problema de los refugiados sirios y garantizar su regreso voluntario y seguro, sin dependencia de las políticas adoptadas por Occidente.
Bajo un gobierno interino de limitados poderes constitucionales, Líbano sortea las dificultades de una etapa de vacancia presidencial, luego de la conclusión del mandato de Michel Aoun, el 31 de octubre pasado.
El Parlamento repitió el 14 de junio último el mismo guion de las anteriores 11 sesiones cuando ningún candidato de la comunidad cristiana maronita logró el respaldo de la mayoría de 128 diputados.
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