Este es el poblado que ha resistido embates de huracanes y temporales, de personas nobles, generosas, laboriosas y combativas, expresó el historiador Juan Carlos Rodríguez ante autoridades locales y asistentes al parque de La independencia, sitio fundacional de la urbe.
Continuamos en dialéctica realización de nuestros proyectos de vida, orgullosos de la historia que protagonizaron nuestros antecesores en la clandestinidad, la sierra y el llano, indicó.
Los primeros asentamientos de Vueltabajo, como también se conoce a la región, se ubicaron en el centro del poblado, en cuyos potreros predominaba la ganadería y luego el cultivo del tabaco, que da fama internacional a Pinar del Río.
Los historiadores coinciden en señalar los finales del siglo XVII como momento de formación de esos establecimientos en torno a las márgenes del río Guamá, con pobladores emprendedores que poco a poco cambiaron la imagen del terruño.
Con su rostro contemporáneo, Pinar del Río se identifica por su hospitalidad y la conservación de sus portales y cubiertas rojizas, que hacen perdurar los aires coloniales.
Conciertos, exposiciones, tertulias y presentación de audiovisuales conforman el programa de celebración por el otorgamiento del título de ciudad a la más occidental de las urbes cubanas, cuna de conocidos pintores, poetas, escritores, músicos y compositores, entre los que resaltan Pedro Junco, autor de la mundialmente conocida canción Nosotros.
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