En una entrevista publicada este domingo por el diario La Repubblica, el canciller italiano también abogó por reformar la asociación estratégica bilateral.
“Entiendo que la parte china está presionando para que permanezcamos en la Ruta de la Seda, pero no estamos satisfechos, aunque repito que no hay deseo de interrumpir las relaciones, al contrario, queremos incrementarlas”, expresó.
Tajani enfatizó que “la Ruta de la Seda no debe ser fundamental en las relaciones con China” y señaló que la participación de Roma en la IFR “es una página de nuestras relaciones que no ha sido ventajosa para nosotros, se lo he dejado claro a todos los líderes del gobierno chino”.
De hecho este fue uno de los temas principales en su agenda durante la visita que realizó a Beijing entre el 3 y el 5 de septiembre último, durante la cual se reunió con el canciller chino, Wang Yi, junto al cual copresidió una sesión del Comité Intergubernamental.
Sostuvo además un contacto con el titular de Comercio del gigante asiático, Wang Wentao, con quien trató acerca del “relanzamiento del diálogo bilateral en sectores de interés común, en el marco de la Asociación Estratégica Global establecida en 2004”, de acuerdo con una nota oficial de la cancillería italiana.
En sus declaraciones, divulgadas este domingo por La Repubblica, Tajani se refirió a la importancia de “disponer de un marco positivo de colaboración desde el punto de vista económico”, e hizo alusión al fortalecimiento de la asociación estratégica pues, según dijo “somos aliados de los estadounidenses, pero no somos enemigos de China”.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, aseguró este domingo durante una conferencia de prensa en Nueva Delhi, tras concluir la reunión del G-20, que “abandonar el acuerdo económico firmado con China, conocido como Nueva Ruta de la Seda, no comprometerá las relaciones con Beijing”.
Sin embargo, la mandataria, quien sostuvo en ese foro un contacto con su homólogo chino, Li Quiang, aseguró que aún no se ha determinado tomar esa decisión, como especularon algunos medios.
«La cuestión es cómo seguir garantizando una asociación beneficiosa para ambos”, enfatizó, pues “tanto Italia como China son conscientes de la importancia de mantener y fortalecer las relaciones”.
Y agregó: “en la mayoría de los casos, en política internacional gana el pragmatismo, y confío en que esta vez también será así”.
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