Dicha cantidad equivale a cuatro mil 849 mil dólares y solo quedarán 80 mil gerentes, directores de empresas, jubilados de privilegios o beneficiarios de compañías de altos ingresos pagando ese tributo, según precisó el también candidato a presidente por Unión por la Patria.
Rodeado de cientos de integrantes de organizaciones sindicales, Massa también comunicó que enviará al Congreso un proyecto para que todos los asalariados dejen de tener que entregar aportes por lo obtenido como resultado del trabajo personal.
En 2015 un candidato (Mauricio Macri) prometió que nadie pagaría ese impuesto y, sin embargo, cuatro años después el doble de los trabajadores lo hacían. En 2019 empezamos a recorrer un camino de disminución y llegamos a este momento en el que menos de 800 mil empleados lo hacen, indicó.
Para mí el salario no es ganancia, sino remuneración, pago por el esfuerzo, aseveró y manifestó la necesidad de que la oposición permita la celebración de los debates correspondientes en el Congreso.
Mi presidencia estará marcada por la recuperación del salario y el ingreso en Argentina, afirmó y prometió que continuará implementando medidas en favor de los trabajadores y el desarrollo nacional, pese “al peor cepo que puede tener un país: un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional”.
Por otra parte, aseguró que muchos ciudadanos tendrán una mejora de hasta el 21 por ciento en sus ingresos, gracias a las normativas informadas.
En los próximos 45 días se juega el futuro de Argentina, si somos una nación que defiende la educación pública, el trabajo, la industria, la soberanía y nuestra moneda o si permitimos que se pierdan los derechos, apuntó.
Les pido de todo corazón que hagamos todo el esfuerzo posible para construir el 22 de octubre el triunfo de los trabajadores, de este país y el peronismo. Depende de ustedes: volvemos a 2015 o caminamos hacia adelante, dijo.
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