Según la Agencia Nacional de Noticias, los combates prosiguen en el eje del barrio de Hattin Jabal al-Halib con ametralladoras y granadas propulsadas por cohetes y balas de francotiradores que apuntan a la carretera del este.
En su quinto día, el conflicto se intensificó al amanecer de este lunes con saldo de una persona fallecida y varios heridos, tras una relativa calma durante toda la noche, precisó el medio.
Reportes locales indicaron que la entrada sur a Saida desde la zona de Al-Hisbah fue cerrada y el tráfico fue desviado hacia la carretera marítima después de que fuera alcanzada por balas de francotiradores.
En la jornada está previsto una reunión entre el director general interino de Seguridad Pública, Elias Al-Bisari, los grupos palestinos y la Autoridad de Acción Conjunta en Líbano, para discutir formas de poner fin a la rivalidad.
A la luz del conflicto, la dirección de la Alianza de Fuerzas Palestinas en el país condenó el ataque ayer con tres proyectiles contra dos centros pertenecientes a unidades del Ejército libanés desplegadas en las proximidades del campamento que provocaron lesiones a cinco soldados.
A través de un comunicado, calificaron de acto sospechoso el incidente destinado a dañar al Ejército y a la soberanía de Líbano; además de pretender dirigir los acontecimientos en Ein al-Hilweh hacia zonas peligrosas con consecuencias indeseables.
En el mensaje, desearon una pronta recuperación para los soldados, destacando la moralidad, la paciencia y la preocupación del Ejército por el pueblo palestino.
De acuerdo con la prensa nacional, los grupos extremistas violaron el alto el fuego en reiteradas ocasiones desde la renovación del conflicto el jueves en la noche.
A finales de julio pasado, el campamento fue testigo de violentos combates entre el movimiento Fatah y grupos extremistas, después de una operación de asesinato dirigida a un funcionario de una de las organizaciones, llamado Abu Qatada.
Los enfrentamientos aumentaron en la zona de refugiados tras el fallecimiento del comandante de las Fuerzas de Seguridad Nacional Palestinas en Saida, Abu Ashraf Al-Armushi, y cuatro de sus compañeros.
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