La Defensa Civil del territorio informó que el último fallecido se registró en Colinas, en el valle de Taquari, a 124 kilómetros de Porto Alegre, capital estadual, donde anteriormente hubo una víctima.
Según el órgano, hasta la fecha se contabilizaron cuatro mil 794 personas sin hogar (necesitan refugio público) y 20 mil 517 desplazadas, es decir, permanecen en otras viviendas.
Además, el más reciente informe apuntó a un crecimiento en el número de municipios afectados por las lluvias, pasando de 96 a 98, además de una subida en heridos (95).
Por otra parte, más de 13 municipios del estado tuvieron estado de calamidad reconocido por el Gobierno. Con eso, el dígito de ciudades bajo este escenario subió de 79 a 92.
Con el reconocimiento, los distritos son capaces de solicitar a la administración federal recursos para asistencia a la población, restablecimiento de servicios esenciales y reconstrucción de infraestructura y viviendas afectadas por el desastre.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva anunció este martes la liberación de 600 millones de reales (un poco más de 121 millones de dólares) del Fondo de Garantía del Tiempo de Servicio para las víctimas del temporal en Rio Grande do Sul.
Recientemente, el gobernador del estado, Eduardo Leite, manifestó que las muertes registradas superan la mayor tragedia natural de las últimas cuatro décadas en la división territorial, cuando 16 personas fallecieron en junio.
El fenómeno se originó en un sistema de baja presión, que provocó intensos aguaceros durante días. Cuando se desplazó hacia el océano cobró intensidad y luego se formó el ciclón.
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