En su discurso de apertura de la Cumbre del bloque, que se inauguró durante esta jornada en el Palacio de las Convenciones de esta capital, el mandatario condenó el actual orden internacional que limita las posibilidades de las Estados con menos recursos para desarrollarse y perpetúa un ciclo de dependencia tecnológico.
Son los pueblos del Sur los que más padecen pobreza, hambre, miseria, muertes por enfermedades curables, analfabetismo, desplazamientos humanos y otras consecuencias del subdesarrollo, expresó.
Añadió que esa condición se debió a siglos de dependencia colonial y neocolonial, y que ya el Sur no soporta el peso muerto de todas las desgracias.
“El único camino válido para que esta nave mundo no termine como el Titanic, es la cooperación, la solidaridad, la filosofía africana del Ubuntu, que entiende el progreso humano sin exclusiones, donde el dolor y la esperanza de cada uno sea el dolor y la esperanza de todos”, afirmó.
Señaló que los logros y avances de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación -temas a los que se dedica el encuentro- contribuirán a lograr el hambre cero, la salud, el bienestar, el agua limpia, la igualdad de género y el crecimiento económico, entre ostros aspectos.
“Es preciso derribar ya las barreras internacionales que han obstaculizado el acceso al conocimiento por los países en desarrollo y el aprovechamiento por parte de ellos de factores tan determinantes para el avance económico y social”, sostuvo.
Estos obstáculos, apuntó, están asociados a un orden económico internacional injusto e insostenible, que perpetúa condiciones de privilegio para los países desarrollados y relega a condiciones de subdesarrollo a una parte mayoritaria de la humanidad.
«Internet ha borrado los límites espaciales y temporales, pero sus vastas posibilidades están fuera del alcance de todos», aseveró.
Lejos de convertirse en herramientas para cerrar las brechas, la política relacionada con las patentes, dijo, tiende a convertirse en armas para profundizar esas diferencias, doblegar la voluntad de muchos gobiernos y proteger el sistema de explotación y saqueo que durante varios siglos ha alimentado la riqueza de las antiguas potencias coloniales.
Eso explica que, en medio del más colosal desarrollo científico-técnico de todos los tiempos, el mundo haya retrocedido tres décadas en materia de reducción de la pobreza extrema y se registren niveles de hambruna no vistos desde 2005, remarcó.
Tenemos el deber de intentar cambiar las reglas del juego y solo lo lograremos si movilizamos la acción conjunta, enfatizó.
La Cumbre del G77 y China, cuya presidencia pro témpore ostenta Cuba, culmina mañana.
Según divulgó el canciller de la isla, Bruno Rodríguez, a ella acuden más de un centenar de delegaciones de los países miembros del bloque y de funcionarios de organismos internacionales.
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