El sistema de alerta contempla la verde cuando existe amenaza de un fenómeno natural de tipo hidrometereologico, amarilla cuando el desarrollo de la amenaza aumentando un 50 por ciento. Naranja, cuando alcanzó un nivel crítico mayor del 75 por ciento y roja cuando su magnitud logró impactar de manera severa, hasta producir una situación de desastre.
Desde el martes y para los próximos días el Marn alertó sobre la incidencia de un sistema de baja presión al sur de las costas de Centroamérica, que dejará lluvias y tormentas en el país.
“Es un sistema de vaguada que va hacia el territorio nacional. Este va generar que tengamos un incremento de nubosidad a lo largo de la cadena volcánica, dónde es posible el desarrollo de algunas lluvias y tormentas con mayor énfasis sobre la cordillera el Bálsamo, de Apaneca-Ilamatepec y también de Tecapa Chinameca”, dijo el meteorólogo Roberto González.
En los últimos días en especial en horas de la tarde y noche las precipitaciones causaron inundaciones, caídas de puentes y derrumbes de viviendas en algunas zonas como en el departamento La Libertad.
Las lluvias afectarán los departamentos de Santa Ana, Chalatenango, al norte de San Miguel, Morazán y serán dispersas por el resto de la zona oriental que se vendrían desplazando hacia el sector costero, informó meteorología.
La presencia del fenómeno del Niño caracterizado por temperaturas más altas y menos lluvias no se corresponde con el incremento de las precipitaciones durante las últimas jornadas, algo que a veces desconcierta a los expertos.
Hace unos meses, el ministro de MARN, Fernando López, presentó las Perspectivas Climáticas 2023, y dijo que sería un año marcado por la transición del fenómeno de La Niña hacia la influencia de El Niño con un ligero aumento de la temperatura y menos lluvia, aunque septiembre acumuló abundantes precipitaciones.
Todo parece indicar que la humedad y la lluvia acompañarán gran parte del mes de octubre para avanzar a hacia noviembre y diciembre como escasos acumulados, según pronósticos.
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