La actual escalada no ofrece paz ni prosperidad sostenibles para ninguno de los involucrados; se ha demostrado que este es un camino que sólo conduce a más derramamiento de sangre, más conflictos y más tragedia, dijo hoy su portavoz Mónica Grayley.
El presidente Francis pidió a todas las partes la máxima moderación así como a promover debates diplomáticos para reducir la escalada, proteger a los civiles y trazar una ruta hacia una solución con dos Estados.
En la mayoría de los casos, añadió la portavoz, las víctimas son ciudadanos inocentes –mujeres, hombres y niños– que pagan el precio.
Por su parte, la representante especial del organismo para los Niños y los Conflictos Armados, Virginia Gamba, instó a cumplir con las obligaciones respecto al derecho internacional humanitario y los derechos humanos, incluidos los principios de proporcionalidad, distinción y precaución.
En un comunicado divulgado aquí, Gamba pidió la protección a los menores frente a la comisión de violaciones graves contra ellos.
Los asesinatos y las mutilaciones, los ataques a escuelas y hospitales y los secuestros son acciones graves contra los niños, recordó.
La representante remarcó que bajo ninguna circunstancia los menores de 18 años deben estar involucrados en un conflicto armado.
“Sólo una solución política negociada duradera a la situación puede brindar a los niños de Israel y del Estado de Palestina la paz y la seguridad que necesitan para ejercer sus derechos y asegurar su futuro. La violencia no es una opción”, subrayó.
oda/ebr