La denominada Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de Naciones Unidas en Malí (Minusma) avanza así en la segunda fase de su plan de retirada, que comenzó el pasado 1 de septiembre.
Para el mes de octubre, el contingente tiene previsto cerrar cuatro campamentos en Douentza, Aguelhok, Tessalit y Ansongo.
La retirada total se debe completar a más tardar el 31 de diciembre de 2023, a solicitud del gobierno de Malí.
Recientemente, las autoridades de Bamako firmaron un acuerdo de Defensa con Níger y Burkina Faso para enfrentar la expansión en sus territorios de grupos islamitas que llevan a cabo actos terroristas.
La denominada Alianza de Estados del Sahel tiene lugar además, luego de que la Comunidad de Estados de África Occidental amenazó con realizar una intervención armada en Níger tras el reciente golpe de Estado militar que depuso en ese país al presidente Mohamed Bazoum.
Por otro lado, las juntas militares de Bamako y Ouagadougou expulsaron a las fuerzas francesas de sus territorios, en tanto su homóloga nigerina también renunció a los acuerdos de cooperación castrense con París, antigua potencia colonial, que también inició ya el retiro de sus tropas.
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