De acuerdo con el Ministerio de Relaciones Exteriores, en los últimos 10 años este megaproyecto siguió los principios de amplia consulta, contribución conjunta y beneficios compartidos, así como un enfoque sostenible centrado en las personas.
Además, el vocero Wang Wenbin resaltó que uno de los principales éxitos de la IFR es su apuesta por la conectividad, «cuya falta se considera el mayor cuello de botella para el desarrollo».
En este sentido, mencionó como proyectos emblemáticos la inauguración de los ferrocarriles China-Laos, Yakarta-Bandung, Budapest-Belgrado y del puerto de El Pireo, Grecia.
«El Expreso Ferroviario China-Europa abrió nuevos corredores para el transporte terrestre en el continente euroasiático, la red marítima de transporte de la Ruta de la Seda presta servicio en todo el mundo, el marco de conectividad de «seis corredores, seis rutas» ha tomado forma», agregó.
Wang recordó que la iniciativa está alineada con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas y tiene sinergia con las estrategias de varios países.
«El Banco Mundial ha estimado que para 2030 las inversiones relacionadas con la Iniciativa de la Franja y la Ruta podrían sacar a 7,6 millones de personas de la pobreza extrema y a 32 millones de personas de la pobreza moderada», comentó.
El portavoz destacó que la IFR propició más de tres mil proyectos de cooperación entre los países miembros.
«Esperamos revisar la experiencia que hemos adquirido y planificar el futuro junto con nuestros socios en el próximo Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional», agregó.
Sobre este particular, la cita está programada para el 17 y 18 de octubre próximo en esta capital y ya han confirmado su presencia representantes de más de 110 países, entre ellos varios dignatarios.
mgt/idm