“La ayuda es nuestra abrumadora prioridad. Y estamos en profundas discusiones cada hora con los israelíes, con los egipcios y con los habitantes de Gaza sobre cómo hacer eso”, precisó el representante.
En declaraciones al portal de noticias de la ONU, Griffiths adelantó que pronto podrían haber “algunas buenas noticias” frente al estancamiento político que impide el acceso de convoyes con insumos vitales desde Rafah, en Egipto, hacia el sur de Gaza.
«La historia está observando», aseveró el coordinador.
Todos los estados miembros tienen obligaciones, no solo los de la región, frente a lo que la ONU califica como la peor escalada palestino-israelí en décadas.
Estados Unidos, Reino Unido, la Unión Europea y el mundo árabe tienen la obligación de garantizar que se protejan las vidas de los civiles y se respeten las reglas de la guerra agregó.
El representante reiteró el llamado a no atacar la infraestructura civil y proteger a la población.
«Asegúrense de que reciban la ayuda que necesitan y de que haya corredores que les permitan un respiro de los implacables ataques que les están sucediendo», remarcó.
La Agencia de Naciones Unidas para los desplazados palestinos advirtió la víspera que más de un millón de personas (casi la mitad de la población total de Gaza) han sido desplazadas.
A pesar de la orden de evacuación de las fuerzas israelíes, un número desconocido de desplazados internos permanecen en las escuelas del organismo en la ciudad de Gaza.
La Agencia ya no puede ayudarlos ni protegerlos, dijo en conferencia de prensa el comisionado general del ente, Philipe Lazzarini.
Por su parte, el canciller egipcio, Sameh Shoukry, criticó a Israel por impedir la entrada de alimentos, medicinas y otros insumos de primera necesidad a la Franja.
Hemos intentado mantener abierto el cruce fronterizo de Rafah desde el inicio del conflicto, el 7 de octubre último, pero lamentablemente las autoridades de esa nación adoptaron otra postura, afirmó el ministro de Relaciones Exteriores durante una rueda de prensa aquí junto a su homóloga francesa, Catherine Colonna.
Ese paso, que une a Egipto con la Franja, es el único que no controla Israel, pero sus aviones bombardearon zonas aledañas en el lado palestino, lo que obligó a cerrarlo.
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