Para conseguir la eliminación de ese padecimiento, que en 2002 era endémico solo en la sureña provincia de Attapeu, las autoridades sanitarias locales y sus socios administraron medicamentos preventivos a comunidades en riesgo entre 2012 y 2017.
También contribuyeron a la erradicación de la elefantiasis, enfermedad parasitaria transmitida por mosquitos, las campañas desplegadas en el país para reducir la malaria y el dengue, este último de alta incidencia con más de 32 mil casos reportados en 2022.
De acuerdo con la OMS, Laos está trabajando para eliminar igualmente otras dos enfermedades transmitidas por vectores: la malaria y la esquistosomiasis.
En el caso de la malaria se prevé que pueda alcanzarse su erradicación para fines de este año, mientras en lo tocante a la segunda se espera poder suprimirla para 2030.
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