Los participantes se sumaron al continuo reclamo de renuncia de la fiscal general Consuelo Porras y varios de sus funcionarios, por el actuar, calificado de ilegal, contra las elecciones y el partido ganador Movimiento Semilla.
Otros cientos de personas (representantes de colonias, estudiantes y pobladores) organizaron caminatas que se desplazaron por distintos puntos de la ciudad con idéntico propósito.
En carteles expresaban que “Si el Ministerio Público (MP) no protege la Constitución, el pueblo lo hará”, “Hasta que renuncien” o “La lucha sigue por un mejor país”.
Una caravana de 25 buses llenos de habitantes de varias comunidades del departamento de Alta Verapaz y del municipio de Ixcán, Quiché, arribó para acompañar el plantón ante la sede del ente investigativo. Desde hace 17 días autoridades indígenas de diferentes organizaciones ancestrales permanecen en ese lugar, día y noche, como expresión de su inconformidad con acciones realizadas.
El MP, considerado un instrumento del pacto de corruptos, ordenó allanar el Tribunal Supremo Electoral por presuntas irregularidades en las votaciones realizadas el 25 de junio y 20 de agosto últimos.
El presidente electo de la nación, Bernardo Arévalo, señaló a Porras, el jefe de la Fiscalía Especial contra la Corrupción, Rafael Curruchiche, y el juez Fredy Orellana de promover un golpe de Estado para evitar su arribo al poder, previsto para el 14 de enero de 2024. Al menos 35 puntos de carreteras estratégicas permanecen bloqueados como parte de las medidas implementadas, la mayoría en la ruta CA-1 Occidente, que conduce de Guatemala hacia Huehuetenango.
El jueves pasado, en reunión con los convocantes a las protestas, el mandatario actual del país, Alejandro Giammattei, manifestó que no tiene facultades para destituir a la también jefa del MP.
Los líderes de las 17 organizaciones ancestrales aseguraron que continuarán en las calles hasta que se cumpla su exigencia e instaron al pueblo a seguir levantando la voz contra los abusos y las violaciones de la Fiscalía.
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