Una persona fue asesinada cada 69 minutos y si esa media se mantiene en lo que resta del año, el país podría cerrar 2023 con un sangriento récord de siete mil 607 homicidios, indicó el portal digital Primicias que compartió el gráfico con datos del Ministerio del Interior.
Ecuador cerró 2022 con cuatro mil 603 muertes violentas, por lo que el incremento de los últimos meses sería del 65 por ciento y, si se compara con 2019, el alza sería del 540 por ciento.
Los número revelados indican que esta nación sudamericana concluirá diciembre con una tasa 44,9 asesinatos por cada 100 mil habitantes, con lo cual Ecuador sería el país más violento de Latinoamérica.
Asimismo, los asesinatos se incluyen ahora entre las causas más comunes de muerte en el país, incluso por encima de enfermedades como la influenza, la neumonía y los accidentes de tránsito.
La crisis en materia de seguridad es la principal preocupación de la ciudadanía y será el principal desafío del nuevo gobierno que liderará el recién electo Daniel Noboa.
Este fin de semana, en el municipio Yaguachi, de la provincia costera de Guayas, hubo una decena de muertes violentas que en estos momentos están bajo investigación policial.
Ecuador se encuentra en medio de un estado de excepción renovado por el presidente Guillermo Lasso luego del asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio, baleado el 9 de agosto cuando salía de un mítin de campaña.
El actual Gobierno alega que los hechos violentos son consecuencia del avance del narcotráfico y el crimen organizado, aunque expertos apuntan también a otras causas como el incremento de la pobreza y la falta de oportunidades para los jóvenes.
“El 85 por ciento de las muertes violentas están en las provincias consideradas como la ruta de la droga y, a escala nacional, el 90 por ciento de estas muertes están vinculadas a crimen organizado”, afirmó este lunes el ministro del Interior, Juan Zapata.
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