Todavía sin que se conozcan los resultados finales de esos comicios, organizados desde hace poco más de un año, los cuestionamientos y deformación del proceso quedaron al desnudo este domingo ante tanta evidencia revelada, al punto de no pocos considerarlos viciados y fraudulentos.
El segundo parte ofrecido anoche por la Comisión Nacional de Primarias, casi 20 horas después del primero divulgado, lejos de dar credibilidad hizo aumentar las sospechas de que “hay gato encerrado” y como dijo el primer vicepresidente del Partido Socialista Unido, Diosdado Cabello, el “desastre anunciado se cumple”.
Según datos de la mencionada comisión, la virtual ganadora de las elecciones e inhabilitada, María Corina Machado, acumulaba casi un millón 500 mil votos cuando se había contabilizado el 64,88 por ciento de las boletas electorales, para el 92,56 por ciento de los sufragios.
Llama la atención que el boletín del ente electoral opositor reveló las estadísticas después que Cabello denunciara en rueda de prensa las pretensiones de esa oposición de inflar los números muy por encima de lo realmente ocurrido en los centros de votación.
“En verdad el resultado de ayer es el total, de ahora en lo adelante es inflarlo”, dijo el líder político, luego de revelar que poco más de 600 mil personas acudieron verdaderamente a votar el domingo, lo cual le pareció un “un buen número”.
Estaba previsto que en estos sufragios, de acuerdo con la información divulgada con anterioridad por la Comisión de Primarias, que instalarían cinco mil 134 mesas y tres mil 100 centros electorales, datos que a ciencia cierta se desconoce si abrieron todos o cuántos dejarlo de hacerlo.
El dirigente del PSUV subrayó que ellos tratan ahora de inflar los números de votos (pretenden subirlo por encima de los dos millones), y añadió que mientras más altos sean los guarismos “peor para ustedes” porque se van a caer a “cobas y mentiras”.
Cabello expresó que ellos prefieren mentir hasta niveles que nadie cree porque “no tienen ninguna lógica matemática, electoral, ni siquiera existencial”, y aseguró que se trató de una gran operación mediática, “muy bueno para la propaganda”.
Señaló que el país entero es testigo de la cantidad de centros donde “no había nadie” en ninguna hora y en todo el día, lo cual es desconocer lo declarado por ellos mismos durante la campaña de las inconsistencias que había.
Durante la jornada electoral no fueron pocas las irregularidades denunciadas por partidarios políticos, inclusive por candidatos participantes, tanto en Caracas como en otros estados del país, como la no acreditación de los testigos y miembros de mesa o su ausencia, y la reubicación de centros electorales.
Con anterioridad decenas de personas vinculadas a comisiones municipales, estadales y nacional, coordinadores de mesas, entre otros solicitaron su renuncia por considerar no estaban creadas las condiciones para su celebración.
Una muestra del fraude lo expuso Cabello al revelar un audio del municipio Angostura, estado de Bolívar, donde el alcalde pidió “de manera descarada” a una funcionaria electoral incrementar los votos en un centenar.
Otro elemento probatorio lo dio a conocer el dirigente partidista al comentar que los comicios no fueron organizados por ninguna comisión electoral, sino por Súmate, una organización que “es el imperialismo norteamericano”, por lo que detrás quien está es Estados Unidos, reiteró.
Subrayó que Washington está moviendo la plata para todo esto y significó que fue el único gobierno que se pronunció sobre estos comicios.
El presidente Nicolás Maduro también advirtió anoche en su programa Con Maduro +, del envío de dinero de España y Estados Unidos para las elecciones opositoras y alertó sobre nuevas maniobras de la extrema derecha de “montar una nueva jugada” para perturbar la vida nacional.
Para el jefe de Estado lo ocurrido el domingo en las elecciones fue “la crónica de un fraude anunciado”, que han intentado vender como lo que no es.
Si pareciera poco, la bancada de la oposición en la Asamblea Nacional ofreció la víspera una conferencia de prensa en la que consideró “fallido y excluyente” el proceso, en el cual votaron solo 645 mil personas, de los casi 22 millones contemplados en el padrón electoral, es decir el 2,72 por ciento.
Lo que sí quedó claro fue lo dicho por el primer vicepresidente del PSUV que “no hay ni una sola posibilidad” de que una persona inhabilitada pueda ser habilitada para participar en una elección presidencial, en clara alusión a María Corina Machado.
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