Elaborado por la senadora Eliziane Gama, el documento fue aprobado el 18 de octubre con solicitudes de procesamiento a 61 personas, entre ellas el expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022).
Según el diario O Tempo, el documento será traspasado este martes por Gama y otros parlamentarios al STF, en el gabinete del ministro Alexandre de Moraes, quien es ponente de las acciones penales de los episodios antidemocráticos.
En la Procuraduría General de la República los archivos serán recibidos por la fiscal interina Elizeta Ramos.
Por último, el documento será presentado al ministro de la Contraloría General de la Unión Vinícius de Carvalho.
El grupo llevará mañana el voluminoso texto (más de mil páginas) al director general de la Policía Federal, Andrei Passos, y al presidente del Tribunal de Cuentas de la Unión, ministro Bruno Dantas.
Con la información en mano, corresponderá a esos órganos el progreso en el contenido del informe final de la junta legislativa, como la realización de nuevas indagaciones.
La CPI aprobó el informe con 20 votos a favor, 11 en contra y una abstención.
Junto a Bolsonaro, y entre otros, figuran en el listado del escrito los generales Walter Braga Netto, Augusto Heleno, Luiz Eduardo Ramos, Paulo Sérgio Nogueira, Marco Antonio Freire Gomes, Ridauto Lúcio Fernandes, Carlos Feitosa Rodrigues y Carlos José Penteado.
También el excomandante de la Marina, almirante Garnier Santos, el teniente coronel Mauro Cid (exayudante de órdenes de Bolsonaro), el exministro de Justicia Anderson Torres y el exdirector general de la Policía Federal de Carreteras Silvinei Vasques.
El contenido demanda que Bolsonaro sea acusado de los delitos de asociación criminal, intento de abolición violenta del Estado Democrático de Derecho, de deponer gobierno legítimamente constituido y el empleo de medidas para impedir el libre ejercicio de derechos políticos.
«La democracia fue atacada. Las masas fueron manipuladas con discursos de odio. Milicianos digitales fueron empleados para diseminar el miedo, descalificar adversarios y promover ataques al sistema electoral», denunció Gama durante la lectura del informe.
Aseguró que «se intentó corromper, obstruir y anular las elecciones. Y usan la libertad de expresión para ahogar la expresión».
Con pedidos de intervención militar y rechazo a la asunción al poder del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, grupos extremistas partidarios del político ultraderechista invadieron y depredaron en la fecha, marcada negro en la historia nacional, las sedes del Congreso Nacional, el STF y la Presidencia.
oda/ocs