La seguridad de Israel no podrá ser duradera sin el relanzamiento decisivo de un proceso político con los palestinos, afirmó el mandatario en una rueda de prensa acompañado por Netanyahu, como parte de su visita a Israel.
Macron insistió en que la causa palestina debe ser escuchada con razón, declaraciones con las que busca reducir las tensiones en el Oriente Próximo, tras una escalada del conflicto, marcada por el letal ataque de Hamas el 7 de octubre, y los indiscriminados bombardeos y el bloqueo total contra la Franja de Gaza como represalia, con saldo de miles de civiles asesinados.
Asimismo, llamó a otros actores regionales, entre ellos Irán y el movimiento libanés Hezbollah, a evitar la apertura de “nuevos frentes”, un escenario que consideró negativo, porque de “una conflagración regional todos saldrían perdedores”.
En sus comentarios, el presidente francés expresó condolencias a Netanyahu y señaló que la guerra contra Hamas “debe ser sin piedad, pero no sin reglas”, reclamando el respeto a la vida de los civiles.
Por su parte, el primer ministro israelí insistió en la guerra contra Hamas, la cual definió como “entre la civilización y la barbarie”.
Netanyahu esgrimió la cercanía de la amenaza para su país para justificar la cruzada militar, comparando el peligro que el Estado Islámico representaba para Europa, pero a miles de kilómetros de distancia.
Después de su llegada esta mañana a Tel Aviv, Macron se reunió con familiares de víctimas francesas del ataque del 7 de octubre y con el presidente anfitrión, Isaac Herzog, con quien también abordó la urgencia de la movilización para evitar una escalada regional del conflicto.
El mandatario se reunirá más tarde en Ramala, en la ocupada Cisjordania, con el líder palestino, Mahmoud Abbas.
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