El análisis en la corte se hace extensivo para su entonces candidato a vicepresidente en las elecciones de octubre del pasado año, general de la reserva Walter Braga Netto.
Bolsonaro y Braga Netto son acusados en este caso de abuso de poder político y económico, uso indebido de medios de comunicación y conducta indebida para beneficiar sus candidaturas en actos oficiales del bicentenario de la emancipación de Portugal.
Las solemnidades fueron hechas en Brasilia y Río de Janeiro, costeadas con dinero público y transmitidas por la TV Brasil.
En los eventos, el exmandatario participó en actos de campaña montados de manera cercana y paralela a los oficiales.
La sesión del pasado martes, que se reanudará este jueves y puede extenderse hasta el 31 de octubre, estuvo marcada por los argumentos de los abogados de acusación y defensa, además de la manifestación del Fiscal Electoral por la condena del político ultraderechista.
En las acciones, el Partido Democrático Trabalhista y la senadora Soraya Thronicke piden la inhabilitación de Bolsonaro, además de la aplicación de multa por utilizar las conmemoraciones de la Independencia para promover su reelección.
Según la imputación, el otrora jefe de Estado aprovechó esa fecha para realizar actos de campaña, utilizando la «máquina pública en beneficio propio».
Durante la audiencia, el procurador general electoral, Paulo Gonet, afirmó que Bolsonaro cometió abuso para obtener una ventaja electiva y también reprobó el uso de las Fuerzas Armadas en la cruzada proselitista.
Por su parte, el abogado Tarcisio Vieira de Carvalho rechazó las inculpaciones e insistió en que su defendido no utilizó la celebración del 7 de septiembre para su candidatura.
«Después de la clausura del evento, (Bolsonaro) se dirigió al lugar y, sin la banda presidencial, habló en la fase posterior del evento oficial, solo para aquellas personas que se trasladaron al lugar y se dispusieron a escuchar», alegó la defensa. En caso de condena, el excapitán del Ejército puede quedar inelegible, por segunda vez, durante ocho años.
Sin embargo, ese plazo sigue siendo válido en función de la primera sanción y no se contará dos veces. El castigo también puede alcanzar a Braga Netto.
En junio, el expresidente fue condenado por la TSE a la inelegibilidad durante ocho años (hasta 2030) por abuso de poder político y uso indebido de los medios de comunicación, al atacar el sistema electrónico de votación en una reunión con embajadores extranjeros, en julio de 2022 en el Palacio de la Alvorada (residencial oficial de la Presidencia).
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