Votantes en más de una docena de estados de la Unión acudieron a las urnas para elegir gobernadores, alcaldes y otros cargos, y decidir sobre libertades civiles y el aborto.
Para muchos quedó claro, por ejemplo, que los derechos vinculados al aborto tienen impacto dondequiera que aparezcan en una boleta electoral y eso constituye para los demócratas una buena noticia.
Los comicios de este 7 de noviembre llegaron en un momento en que se definen las estrategias de los dos partidos que dominan el espectro en Washington, Demócrata (azul) y Republicano (rojo) para las elecciones del próximo año.
Algunos cintillos en la televisión estadounidense resumieron que fue una gran noche para los demócratas y no dejan de tener razón.
En Ohio triunfó una medida electoral que consagrará la protección del aborto en la constitución del estado y el resultado allí -que también avaló el uso recreativo de la marihuana-se produjo solo unos meses después de que rechazaron otra iniciativa para restringir la práctica.
De una manera u otra, los números de ayer estuvieron vinculados al tema, porque en Kentucky, el gobernador demócrata Andy Beshear fue reelegido al derrotar al fiscal general estatal Daniel Cameron, un republicano que defiende la prohibición del aborto y con estrechos vínculos con el expresidente Donald Trump (2017-2021).
Mientras en Misisipi, el gobernador republicano Tate Reeves se impuso al demócrata Brandon Presley, pero fue Virginia el tremendo fiasco, porque el también gobernador del mismo partido, Glenn Youngkin, fracasó en su promesa de implementar prohibiciones al aborto al ganar los demócratas el control de ambos órganos legislativos del estado.
Los azules se alzaron con el liderazgo de la Cámara de Delegados y mantuvieron su mayoría sobre el Senado estatal, lo que marcó un cambio respecto a dos años atrás, cuando Youngkin fue electo para el cargo y los rojos se anotaron el control del hemiciclo.
Otros resultados destacados en la jornada fueron la elección en la propia Virginia de la demócrata Danica Roem como primera senadora estatal abiertamente transgénero y en Filadelfia (Pensilvania) tendrán a la primera mujer alcaldesa de su historia, la azul Cherelle Parker.
A su vez, los demócratas obtuvieron varios escaños en la asamblea de Nueva Jersey y conservaron puestos competitivos en el Senado estatal, y en Houston (Texas), el alcalde se decidirá en segunda vuelta el 9 de diciembre.
Tras los informes de Ohio, el presidente Joe Biden -que no ha tenido motivos de celebración en los últimos días por las malas notas en las encuestas- dijo que “los estadounidenses votaron una vez más para proteger sus libertades fundamentales y ganó la democracia”.
mem/dfm