Así lo confirmaron a Prensa Latina expertos de esa compañía durante un recorrido por sus instalaciones, ubicada en esta urbe de la provincia oriental de Jiangsu.
Con una producción anual de 400 toneladas y un ingreso de 10 mil millones de yuanes (unos mil 400 millones de dólares), la empresa deviene referente en la fabricación inteligente, porque combina técnicas centenarias con la innovación, comentó un vocero.
Según informó, Jiangsu King’s Luck Brewery utiliza nueve robots responsables de diversas etapas del proceso desde la selección de ingredientes hasta el embotellado.
Los expertos explicaron que el licor chino de King’s Luck se distingue por el uso cuidadoso de ingredientes de alta calidad, como el arroz y la soya.
El proceso de fermentación y envejecimiento varía de dos a seis meses, en dependencia del producto final, y por otro lado, producen licores con graduaciones que oscilan entre 40 y 75 grados.
Después de la destilación, el sedimento resultante se utiliza de manera sostenible como alimento para animales, en particular, para alimentar al ganado, expusieron voceros y expertos durante el recorrido por la línea de producción.
Aunque la destilería conserva las técnicas ancestrales para preservar el patrimonio cultural, la mayoría de la producción emplea tecnologías de vanguardia.
Según explicaron, la fabricación de licor representa un símbolo en la tradición local, por lo que la empresa es un incentivo para el turismo regional y un motor para la economía de la ciudad.
Prensa Latina visitó la línea de producción de esta empresa como parte de las actividades del sexto Proyecto Fotográfico Show Jiangsu, en el que participan representantes de medios de comunicación del mundo.
La edición de este año está dedicada a la IFR, un megaproyecto impulsado por China desde hace una década que prioriza la construcción de diferentes rutas terrestres y marítimas para la interconexión comercial y económica de Asia, Europa y África principalmente.
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