La jefa del Consejo Nacional Electoral, Diana Atamaint, afirmó que el nuevo gobernante tendrá en sus manos la responsabilidad de conducir el país por una democracia plena y justa.
Su presencia avizora esperanza y cambios para nuestra sociedad, soñamos con un país sin corrupción, con seguridad, empleo, salud y educación, aseveró Atamaint, quien llamó a dejar la polarización política a un lado y caminar hacia el desarrollo de Ecuador, sin renunciar a posiciones ideológicas.
Tras recibir el certificado, Noboa pronunció un breve discurso, en el cual declaró no tener líneas rojas para dialogar, pero sí para el accionar, pues «jamás estaremos a favor de la impunidad y tampoco apoyaremos a fuerzas políticas e individuos que quieran violentar la Constitución».
Advirtió que su administración tocará fibras de grupos enquistados en la corrupción y no apoyará organizaciones criminales.
Agradeció a las organizaciones políticas que sin presiones se unieron para respaldar al próximo Ejecutivo y sacar adelante a la nación, porque «tenemos una ardua labor, no será fácil, necesitamos el apoyo de todos».
En la ceremonia protocolar, realizada en el teatro Nacional Sucre bajo un fuerte resguardo de seguridad, también recibió su credencial la vicemandataria electa, Verónica Abad.
Fue la primera vez que Noboa y Abad aparecieron juntos públicamente desde que resultaron electos, pues no compartieron para celebrar el triunfo el 15 de octubre pasado ni hoy interactuaron más que para un saludo.
En el acto de este miércoles estuvieron presentes miembros del futuro gabinete, representantes del cuerpo diplomático, observadores electorales y otros invitados.
La toma de posesión del futuro gobernante tendrá lugar el próximo 23 de noviembre en la sede de la Asamblea Nacional y ese día iniciará su periodo de gestión extraordinario hasta el 24 de mayo de 2025.
El sucesor de Guillermo Lasso recibirá un país sumido en la peor ola de inseguridad de la historia, una crisis energética y problemas en su economía.
A ocho días de asumir el cargo, el gabinete ministerial está incompleto, no se han anunciado todos los nombres y las principales expectativas están justamente en quiénes serán los encargados de la crisis de
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