La cifra forma parte de un balance de la gestión de su gobierno, que el gobernante presentó ante cientos de empresarios reunidos en la cena anual del Centro de Estudios para el Desarrollo (CED), de corte liberal.
Lacalle Pou mencionó a la pandemia por la Covid-19, la guerra entre Rusia y Ucrania, la sequía y la diferencia de precios con Argentina por la que muchos uruguayos se van de compras al vecino país.
“Fueron 4.144 millones de dólares, entre lo que gastamos y lo que no ingresó”, apuntó y aseveró que pese a ello se consiguieron resultados positivos.
El mandatario encomió números en materia de creación de puestos de trabajo, empleo, salario real, inversiones en infraestructura y récord en exportaciones en 2022.
Frente a críticas por la rebaja de impuestos en unos 150 millones de dólares opinó que “ha sido uno de los motores del consumo”.
El presidente uruguayo se declaró inconforme con los resultados en tema de seguridad pública, aunque dijo que los números muestras bajas en las rapiñas y los hurtos, y trabajo por hacer en materia de homicidios.
Durante su alocución no mencionó el aumento de la pobreza, pero destacó la inauguración del hospital en el populoso municipio del Cerro, el incremento de lo destinado para asentamientos y el trabajo del Ministerio de Desarrollo Social para la reinserción de excarcelados.
Entre los pendientes el mandatario mencionó que “donde no hemos tenido mucha suerte es en las relaciones exteriores”.
Afirmó que Uruguay “desde hace muchos gobiernos” tiene “una visión clara”, que “no necesariamente se ha transformado en acción”.
Subrayó que el gobierno fue “insistente” con los países vecinos en plantear que “no tenemos por qué optar entre el Mercosur o China”.
Defendió al respecto el derecho de su país a conseguir acuerdos con terceros países más allá del Mercosur, y en particular alcanzar un tratado de libre comercio con el gigante asiático.
Calificó de “ingrediente distinto” la llegada de Javier Milei a la presidencia de Argentina.
“Vamos a hablar con Milei en buenos términos, creemos que bajo su manto liberal va a ver al vecino y decir ‘así como yo soy liberal quiero que tú seas libre’. Uruguay no pretende concesiones ni privilegios, si nos dejan ser libres, nos revolvemos con el resto del mundo”, enfatizó.
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