La marcha de un contingente de maestros de las secciones 9, 10 y 11 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), se sigue realizando con el fin de obtener mejoras salariales, coincidentemente con un anuncio del Gobierno de un amento del 20 por ciento del salario mínimo nacional, lo cual parece incongruente.
Un grupo de aproximadamente 100 manifestantes irrumpió violentamente la víspera en la Secretaría, abrió las puertas de madera e ingresó tratando de tirar la reja de metal que da acceso al interior del edificio, una reliquia arquitectónica.
La entidad respondió que al Gobierno de México lo caracteriza la atención y escucha a quien lo solicita y los aumentos de salario sostenidos en sus cinco años de mandato.
No obstante, para cumplir sus derechos de manifestación y petición se les ofreció a los maestros -previamente a las expresiones violentas que generaron incluso golpes a policías y trabajadores de la secretaría- una mesa de trabajo con el objeto de construir, mediante el diálogo respetuoso, una ruta de atención a sus planteamientos. Esa mesa ya se instaló.
Un comunicado de la instancia expresó que extraña la presencia de algunos manifestantes ajenos al magisterio, quienes mostraron violencia no característica de las movilizaciones de docentes que ha encabezado la Sección 9 Democrática, pertenecientes a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Reiteró la disposición para mantener el diálogo permanente y el trabajo, con el fin de lograr mejores condiciones para maestras y maestros, y condena los actos de violencia que ponen en riesgo la integridad de las y los trabajadores.
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