Texto y fotos: Isaura Diez Millán
Corresponsal jefe de Prensa Latina en China
En entrevista con Prensa Latina, Ma Liang, dueño de la vinícola Huahao, aseguró que el desarrollo del sector en esta región autónoma comenzó hace unos 30 años y en la actualidad cuenta con más de 200 bodegas donde se producen diferentes tipos de vino.
«Es lo que en nuestra cultura llamamos el tiempo y el lugar adecuados, hay muchas personas detrás de este proyecto, desde el gobierno hasta las empresas, ya hemos establecido una cadena industrial y a eso le agregamos el turismo cultural», señaló.
Aunque Huahao se especializa en la producción de vino a partir del Marselan, es el Cabernet Sauvignon la principal variedad de uva que se cultiva en la región y representa el 70 por ciento de los viñedos de la zona.
Prensa Latina visitó cinco de esas bodegas y pudo constatar en sus zonas de producción que hacer esa bebida en Ningxia es un proceso complejo y trabajoso.
Aunque comparte una latitud similar con las grandes regiones vitivinícolas del mundo, como Burdeos en Francia, el clima de la provincia china es árido y seco con lluvias mínimas y largos inviernos, como el de ahora.
Para garantizar que los viñedos sobrevivan en los meses fríos, los viticultores enterraron sus vides en un montículo aislante de tierra apilado alrededor de la base de la planta con el fin de proteger las uvas de las heladas.
Sin embargo, el panorama cambia radicalmente en el tiempo de producción, porque la abundante luz solar del día junto con las noches frescas, ayudan a las uvas a conservar la acidez y ralentizar su proceso de maduración, lo que influye en el sabor final del vino.
NINGXIA: EL VINO DE ALTA GAMA
La superficie de cultivo y desarrollo de uvas en esa región supera las 38 mil 800 hectáreas y la producción es de 138 millones de botellas, lo que representa casi el 50 por ciento del total de vinos de bodega elaborados en China.
Así lo confirmaron a Prensa Latina autoridades locales, quienes además aseguraron que más de 60 establecimientos ganaron mil 300 premios en competiciones internacionales relevantes como Vinitaly, Bruselas y Berlín, esto constituye el 60 por ciento de los galardones del sector en el gigante asiático.
Los vinos de aquí se exportan a más de 40 países y regiones, es la «tarjeta de presentación púrpura» de Ningxia en su diálogo con el mundo.
Además, las bodegas reciben anualmente más de dos millones de visitantes, lo que está en consonancia con el objetivo de crear una industria vitivinícola que promocione las zonas ribereñas del río Amarillo, la restauración ecológica y el turismo cultural.
En declaraciones a Prensa Latina, Yao Sijia, gerente del Departamento de Mercado Internacional de la vinícola Xige State, resaltó la expansión de esa marca en Europa, reconocida por aplicar alta tecnología en la siembra y producción de uvas.
«Hemos ganado muchos premios internacionales y nuestros productos se exportan a varios países como Reino Unido, Singapur y Canadá», enfatizó.
Por su parte, Liu Qian, embajadora de Xige State subrayó a Prensa Latina las ventajas del suelo arenoso y pedregoso de drenaje libre ubicado en la base de la montaña Helan, que les brinda una producción única.
También destacó las oportunidades de empleo que la industria del vino genera en Ningxia y en particular comentó que su vinícola cuenta con 100 empleados en la bodega y casi 200 personas en toda la zona productora, la mayoría de ellos locales.
Sobre ese particular, las autoridades de la ciudad de Yinchuan comentaron que la industria proporciona anualmente 130 mil empleos a los habitantes, con ingresos salariales de alrededor de mil millones de yuanes (unos 140 millones de dólares).
Asimismo, la región contrató a 60 enólogos de 23 países y nombró a 25 sumilleres como «Embajadores de Promoción del Vino de la Ladera Este de la montaña Helan», con la intención de impulsar la influencia internacional del vino de Ningxia.
EN ARMONÍA CON LA NATURALEZA
«Hacemos el mejor vino espumoso», dijo a Prensa Latina Lin Lin, asistente de producción de Chandon, una vinícola internacional ampliamente reconocida por sus bebidas y que tiene terruños en otras partes del mundo como Brasil y Argentina en América Latina.
En opinión del experto, las características del suelo y el clima de Ningxia permiten fabricar un espumoso de alta gama con el método tradicional que tarda unos dos años en producirse.
Por otro lado, la zona está alineada con los estándares internacionales y se convirtió en el único observador provincial de China en la Organización Internacional de la Viña y el Vino.
El gobierno prioriza el desarrollo del sector en esta otrora región minera y construyó un corredor de 195 kilómetros para el cultivo de uvas que incidió en la transformación de unas 25 mil 333 hectáreas de tierras desérticas en un nuevo oasis.
En una conversación con Prensa Latina, la propietaria de la vinícola Fei Tswei, Zhang Yanli (Lily), expresó su amor por este terruño y la importancia de construir una industria en armonía con la naturaleza.
Según explicó, en 2012 quedó impresionada con este lugar y desde entonces se estableció aquí para cultivar 12 variedades de uvas de producción en serie, en las que se incluyen el Cabernet Sauvignon, Merlot, Pinot Noir, Malbec, Syrah, Petit Verdot, Marselan, Dunkelfelder, Chardonnay, Viognier y otras.
Su bodega busca integrarse de forma armoniosa con el paisaje, semejante a la solidez de una roca, «como una ofrenda a la tierra en agradecimiento por los regalos de la naturaleza», subrayó.
Más allá de la filosofía ancestral de la cultura china, el desarrollo verde y el respeto al medioambiente son objetivos del gobierno nacional en su camino hacia la construcción de un país moderno y limpio.
A más de mil metros de altura sobre el nivel del mar, la ladera de la montaña Helan pone a Ningxia y a China en el mapa de los vinos de alta gama con bodegas suntuosas o pequeñas cuyo principal objetivo es cautivar con una copa de vino de esta tierra.
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