El pronóstico coincide con el del Banco Central que fijó el crecimiento del Producto Interno Bruto cercano al uno por ciento en 2023, luego de la reactivación del agro y su recuperación de la sequía.
La cámara destacó que la mejoría de la actividad económica en el tercer trimestre permitió escapar de la línea de recesión.
Sin embargo, recordó que en la comparación interanual en lo que va de 2023 está 0,4 por debajo de los niveles de igual período de 2022.
El reporte evaluó la persistencia de factores estructurales como menores importaciones de la economía china, la situación de precios relativos desfavorable en especial por la diferencia cambiaria con Argentina y su impacto en el sector Comercio y Servicios, así como la pérdida de competitividad con los principales socios comerciales.
Durante el primer semestre persistió la sequía y sus efectos en la actividad agropecuaria pero también en los sectores conexos, añade el informe.
«Tampoco quedan dudas que la dinámica mundial tanto regional como extra regional no ha sido un estímulo para la economía local, traduciéndose en sucesivos meses de caída en los volúmenes de bienes exportados”, acotó el texto.
Para 2024 la Ccsuy anticipó “una mirada relativamente más optimista” y señaló que las proyecciones de crecimiento alcanzan el tres por ciento, “en gran parte por un rebote tanto del sector agro como la industria manufacturera”.
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