Tal solicitud afloró en medio de la repercusión por el suicidio de Jéssica Vitória Canedo, de 22 años, quien se quitó la vida después de ser víctima de fake news (noticias falsas) diseminadas por perfiles de entretenimiento, como Choquei, en redes sociales.
La plataforma de noticias de celebridades divulgó que la joven tendría una relación amorosa con el humorista Whindersson Nunes, quien negó ese vínculo.
Según la familia de Canedo, ella sufría de depresión.
«Entre los desafíos que no se pueden posponer para 2024, sin duda hay que destacar la necesidad de Brasil de enfrentar la necesidad de regular las plataformas digitales y combatir las fake news”, escribió Pimenta en la red social X (antes Twitter).
Consideró que no es un tema del gobierno, sino de «la sociedad, un imperativo para la protección de la democracia y la integridad de la información que circula por Internet».
Refirió que «todas las democracias del mundo hoy se ocupan de esta materia, en la búsqueda del equilibrio necesario entre regulación y libertad de expresión. Internet no puede ser el reino de la impunidad», advirtió.
La víspera, otros ministros también defendieron la regulación de las redes sociales para combatir la difusión de noticias falsas.
En publicaciones en esos medios, el ministro de Derechos Humanos y Ciudadanía, Silvio de Almeida, declaró que la regulación resulta un imperativo civilizatorio.
«La irresponsabilidad de las empresas que rigen las redes sociales ante contenidos que otros irresponsables e incluso criminales propagan en ella ha destruido familias e imposibilitado una vida social mínimamente saludable», rasgueó.
En la misma arista, la titular de Mujeres, Cida Gonçalves, apuntó que la muerte de Canedo fue causada por la irresponsabilidad de perfiles que lucran con la misoginia y la diseminación de mentiras.
Calificó de mentiroso el contenido que hizo «crecer una campaña de difamación contra la joven», la cual no fue retirada «del aire ni por el dueño de la página ni por la plataforma X a lo largo de casi una semana», subrayó.
Al respecto, Choquei precisó en nota que no hubo «ninguna irregularidad» en la información publicada y las publicaciones fueron hechas con los «datos disponibles en el momento».
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