El proyecto busca sembrar una cultura que reconozca la diversidad, la diferencia, la identidad y la pluralidad de la nación y sus pobladores a través de la formación artístico-musical, en regiones con Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET) y en Zonas más Afectadas por el Conflicto (Zomac).
De acuerdo con un comunicado divulgado por la presidencia, el propósito es llevar la cultura a todas las escuelas y colegios del país, y democratizar su acceso, según lo planteó el mandatario, Gustavo Petro.
En 2023, acotó la información, 100 establecimientos educativos resultaron beneficiados por el programa con la participación de 320 artistas formadores, y cuya inversión para este año fue de 48 mil 558 millones de pesos, aproximadamente 12 millones 500 mil dólares al cambio actual.
Hasta la fecha, se realizaron 50 conciertos en el territorio nacional, el último de ellos efectuado el pasado 21 de diciembre en Monguí, Boyacá, en el centro-este, añadió.
Precisó igualmente que con anterioridad la Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia llevó su arte al Malecón de Quibdó, Chocó (noroeste), en “lo que fue considerado un encuentro histórico de artistas locales y nacionales, gracias al concierto Pazcífico Sinfónico”.
El ministro de Culturas, las Artes y los Saberes, Juan David Correa, declaró que la iniciativa se trata de “una política con la sensibilidad suficiente para dejar atrás distintas formas de violencia simbólica y con la audacia necesaria para tejer diálogos que ayuden a labrar caminos de paz, comprensión y convivencia”.
Del total de niños y adolescentes beneficiados por el programa, el 8,9 por ciento pertenece a algún pueblo indígena y el 7,2 por ciento se identifica como campesino, informó el comunicado.
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