La suspensión de la energía aspira a bajar el elevado índice de morosidad entre la población, que en 2023 cerró con un 29 por ciento, comunicó el gerente comercial de la empresa estatal, Rodys Rolón, en declaraciones a Radio Chaco Boreal 1330 AM.
Los cobradores de la Ande exigirán para mantener o restablecer las instalaciones de la energía solo el pago de al menos una de las tres facturas adeudadas, o mediante un acuerdo con los clientes para evitar el corte de luz.
La Ande tiene una deuda acumulada de 200 millones de dólares en todo el país, el 80 por ciento de la cual es por parte de clientes residenciales consumidores del servicio de baja tensión.
El corte del servicio a los deudores, que será ejecutado en lo que resta de enero, es el único método –explicó el gerente- que realmente funciona para que los usuarios paguen sus cuentas vencidas.
La ANDE aspira para fines de año a bajar hasta un 20 por ciento la cantidad de clientes morosos, cifra que en la actualidad está en un 31 por ciento.
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